-Personal del Hospital Psiquiátrico.

-Ponen a funcionarios de Enfermería a limpiar ambulancias y servir comida.

Por este camino deben pasar los trabajadores a pie para poder desinfectarse.

A pesar de que la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) anunció con bombos y platillos la readecuación del Hospital Nacional Psiquiátrico Manuel Antonio Chapuí para atender pacientes con COVID-19, lo cierto es que los funcionarios están trabajando en condiciones precarias, en medio de un barrial.

Según han manifestado los trabajadores al Sindicato Nacional de Enfermería y Afines (SINAE AFINES), la entrada habilitada para el ingreso de ambulancias y el espacio donde se debe desinfectar el vehículo están llenos de lodo.

Aunado a ello, señalan los funcionarios, en este caso Asistentes de Pacientes, que no cuentan con sitios adecuados para poder lavarse las manos ni para cambiarse los guantes y las mascarillas.

“Ahí (en espacios con barro) es donde debemos desinfectar las unidades, situación que por perfil ocupacional no nos corresponde, no hay mueble que podamos usar para cambiarnos, no se nos facilita la ropa adecuada por escases y, lo que nos dan es una bata plástica que nos colocamos encima del uniforme. Así debemos limpiar las ambulancias”, manifestó un funcionario, quien pidió resguardar su identidad.

Añadió que, en caso de requerir ducharse debido a las condiciones en el abordaje de un paciente positivo, deben ingresar hasta el servicio de Emergencias, pero no pueden hacerlo porque está prohibido el ingreso si están “contaminados”.

Pedimos explicaciones

Debido a la situación, este viernes el SINAE AFINES requirió de manera vehemente mediante oficio SEC-ASUNT-SINDICALES-059-2020 una reunión con Cristian Elizondo Salazar, subdirector Médico del Hospital, con el fin de abordar y dar solución a este y otros problemas.

En el oficio firmado por Harold Chinchilla Castro, Secretario de Asuntos Sindicales de esta organización, se cuestiona los motivos que provocaron que los Asistentes de Pacientes deban limpiar y desinfectar la ambulancia cuando realizan traslados de pacientes sospechosos.

También se solicita conocer los argumentos que llevaron a establecer que el personal de Enfermería deba realizar funciones de nutrición en áreas para COVID-19 o en cuarentena, específicamente entregando la alimentación y recogiendo las bandejas con los restos de comida.

Otra situación irregular por abordar en la reunión solicitada son las labores que no competen a los Asistentes de Pacientes y Auxiliares de Enfermería como el acarreo y distribución de ropa en áreas destinadas para la atención de COVID-19.

“Deseamos conocer cuáles son los compromisos adquiridos institucionalmente para los trabajadores del proyecto COVID-19/HNP, toda vez que, si en este momento hemos detectado grandes errores en cuanto a la protección y aplicación debida de los protocolos, con grandes contradicciones al momento de orientar a un compañero sospechoso por contacto dentro de la jornada laboral”, apuntó Chinchilla Castro.

La CCSS solicitó a la Contraloría General de la República (CGR) un total de $4,515,000 para readecuar las instalaciones del centro médico en cuestión, de ese monto, $1,500,000 eran específicamente para infraestructura y $3,015,000 para equipamiento.